¿Como cuidamos de nuestras familias?
23 mayo, 2017
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¡¡¡¡¡CUIDADO CON LOS CUIDADOS!!!!!
- Todo el mundo necesita cuidar y ser cuidado.
- Existen los cuidados recíprocos y los cuidados jerárquicos.
- Las parejas deben sentir que dan y reciben cuidados recíprocos.
- Los hijos deben sentir que reciben el cuidado de padre y madre.
- Un padre o una madre sana disfruta cuidando de sus hijos.
- La manera de cuidar puede diferir entre personas: hay cuidados alpha (el/la que lidera a la tribu) y cuidados omega (el/la que se asegura de que lleguen todos). Ambos útiles, válidos y necesarios.
- Los hijos nunca deberían cuidar de sus padres, los hijos deben prepararse para cuidar de la siguiente generación.
- Un adulto que no tiene hijos también es responsable del cuidado de la siguiente generación.
- Los padres sanos no esperan los cuidados de sus hijos, se procuran la vida y se apoyan en su generación para ser siempre cuidadores de los suyos.
- Si tienes que atender las necesidades de tus padres ancianos, hazlo siempre desde el respeto, la admiración, el cariño y la seguridad que proporciona la subordinación jerárquica.
- Si no has recibido cuidados sanos: acepta y agradece lo recibido; y prueba relacionarte de una forma más sana con la siguiente generación.
¿REPRODUCIMOS EN LAS EMPRESAS/INSTITUCIONES EL MODELO FAMILIAR?
SI CONSIDERAS QUE TU FAMILIA SE RIGE BAJO EL MODELO DE CUIDADOS MUTUOS ENTRE LOS PADRES PARA PODER ATENDER A LAS NECESIDADES DE TUS HIJOS
¿Por qué no reproduces este modelo en tu empresa?
- A la cabeza de la jerarquía: un poder mixto con representación de los valores masculinos y femeninos, tan necesarios ambos para crecer en sanamente.
- Permite el relevo de poder cuando hay cansancio, estrés, ausencia, descanso…
- Evita la soledad del poder.
- Ambos conocen todos los ámbitos de la institución aunque se especialicen en algunos.
- Incluye distintas formas de organizar, analizar, gestionar, evaluar, planificar…
- Este modelo sólo funciona si existe plena igualdad jerárquica y sentido de apoyo mutuo y recíproco.
- Facilita un liderazgo sano para los colaboradores
- Dificulta el exceso de delegación
- Los colaboradores se sienten seguros, incluidos y aceptados.
- Permite que un líder esté atento a la innovación externa y el otro de incluir la innovación propuesta por los colaboradores.